La práctica, ilegal, consiste en un intento por aumentar el precio de una acción a través de recomendaciones basadas en datos falsas o muy exagerados para, una vez conseguida la suba, descargar tenencias en inversores desprevenidos que intentan sumarse al boom.
Aparentemente esto sucedió el jueves pasado en la bolsa de Nueva York, cuando la acción del Grupo Supervielle llegó a subir hasta 52% dentro de la rueda para, después de sacudirse durante todo el día, cerrar a USD 2,39 con un avance de 9,63% en dólares.
En la bolsa porteña no saltaron las alarmas ya que la volatilidad local no fue tan descontrolada como en Wall Street.