Hacer ejercicio durante el embarazo mejora la salud de la madre y del bebé. El tipo e intensidad dependerá mucho del período de gestación y de lo que indique el ginecólogo.
Danza, yoga, pilates, andar bicicleta o caminar son algunas de las actividades preferidas y permitidas. A continuación, los beneficios de hacer deporte durante esta etapa:
1. Ayuda a mantener un peso saludable: hacer ejercicio de manera regular permite llevar un mejor control del cuerpo, del apetito y de la ansiedad, evitando así ganar kilos extras fuera de lo recomendable.
2. Mejora la calidad de sueño: conforme van pasando los meses, encontrar la posición perfecta a la hora de dormir es cada vez más complicado. Hacer ejercicio genera un mayor desgaste físico y con ello, mayor facilidad para dormir.
3. Mejora el estado de ánimo: durante el ejercicio se liberan endorfinas que proporcionan una sensación de bienestar y mayor energía.
4. Evita la celulitis: causada por los cambios hormonales, cambios fisiológicos y por la mala circulación propios de este período.
5. Reduce la posibilidad de desarrollar diabetes: hasta en un 27%.
6. Disminuye las molestias físicas: como el dolor de espalda y las náuseas. Además, mejora la digestión y ayuda a aliviar la tensión.
7. Mejora el desarrollo del bebé: ayuda al desarrollo de los órganos del bebé, fortaleciendo de manera especial el corazón. Además, disminuye la posibilidad de un parto prematuro.
8. Prepara a la madre para el parto: ayuda a fortalecer toda la musculatura, incluyendo la del abdomen y articulaciones pélvicas. De esta manera, se pueden evitar algunas complicaciones y agilizar la labor de parto.
9. Post parto: hacer actividad durante el embarazo hará más fácil y rápida la recuperación post parto. Algunas semanas después de dar a luz y previa autorización del médico, podrá retomar su rutina regular de ejercicios.
Fuente: Eme de mujer