Racing Club le ganó 1-0 a Independiente en un clásico de Avellaneda que quedará registrado en las páginas más gloriosas de la historia. Marcelo Díaz fue el autor del único tanto del partido y le dio el triunfo a los de Sebastián Beccacece, que aguantaron la mayor parte del desarrollo con dos jugadores menos.
Antes de convertir el tanto que desató la locura del Cilindro de Avellaneda, el mediocampista chileno protagonizó una curiosa acción que sorprendió a propios y extraños. Cuando La Academia estaba con 9 hombres por las expulsiones de Leonardo Sigali y Gabriel Arias, el volante se acercó al banco de suplentes para comer una banana.
Lo inaudito fue que el juego se reanudó y Díaz debió volver al campo de juego con la fruta en la mano, por lo que terminó de ingerirla con el encuentro en pleno desarrollo. Minutos más tarde, recibió un pase de Darío Cvitanich dentro del área y abrió el pie para vencer la floja resistencia del arquero Martín Campaña.