Delincuentes roban $100 mil en la Catedral camuflados de creyentes en la misa

El domingo pasado, la tranquilidad habitual del Arzobispado de Buenos Aires, ubicado al lado de la Catedral y en el que vive el arzobispo Mario Poli, fue quebrada por un violento robo. Un grupo de delincuentes se mezcló entre los creyentes que presenciaban la misa de las 18. Al finalizar –y cuando ya no quedaban testigos en el templo católico– se escabulleron por una puerta lateral, atravesaron el pasillo y llegaron hasta el lugar donde descansa ytrabaja el sucesor de Jorge Mario Bergoglio en la arquidiócesis de Buenos Aires.

Allí, redujeron a un guardia de seguridad y amenazaron con armas a cinco religiosos que se encontraban en las oficinas del primer piso.

Los ladrones sabían que uno de ellos llevaba unos 100 mil pesos. Con el dinero en su poder, y luego de revisar todos los cuartos de la Curia, escaparon sin ser detenidos hasta el cierre de esta edición.[pullquote position=”right”]Delincuentes roban $100 mil en la Catedral camuflados de creyentes en la misa[/pullquote]

Los delincuentes, entre dos y tres, no actuaron de forma espontánea. Por el contrario, “sabían a quién buscaban, conocían el nombre del cura que tenía el dinero”, indicó un informante. Además, contaban con una llave con la que pudieron ingresar a la Curia, lo que hace pensar a los investigadores que hubo un entregador.

Además de la plata, los delincuentes se “apoderaron de alcancías y otros objetos de valor” que encontraron en los tres pisos que ocupa el Arzobispado en el edificio de Rivadavia 415. “Revolvieron todo”, resumió un investigador del caso.