El 9 de junio, el empresario argentino Alejandro Burzaco, ex CEO de la compañía de trasmisiones deportivas Torneos, se entregó a la policía de Bolzano, localidad del norte de Italia, por la causa que sigue la Justicia de Estados Unidos por el escándalo de corrupción en FIFA. [pullquote position=”right”]Burzaco aceptó la extradición para ser juzgado por la Justicia de Estados Unidos[/pullquote]
En dos semanas, Burzaco será extraditado a los Estados Unidos para declarar en la causa, en la cual se lo acusa de cuatro delitos: soborno, conspiración, lavado de dinero y corrupción.
En las próximas horas, el abogado Mariano Mendilaharzu viajará a Italia para ultimar los detalles, entre ellos las condiciones de detención del empresario argentino. Burzaco habría aceptado la comisión de sus abogados para acelerar los trámites de extradición a Nueva York, donde se encuentra el juzgado que investiga el escándalo en la FIFA.
La declaración de Burzaco preocupa en la Argentina, ya que podría salpicar a la dirigencia política y la cúpula de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA). Es que por el rol estratégico de la empresa que conducía, el directivo mantenía una estrecha relación con Julio Grondona y otros altos dirigentes.
Leer más: Zannini, candidato a vicepresidente de Scioli, salpicado por el escándalo de la FIFA
Burzaco está acusado de haber pagado u$s40 millones en sobornos a dirigentes de la Conmebol. La intención de la maniobra era quedarse con la organización y transmisión de las principales competencias deportivas, entre ellas la Copa América que se realizó en Chile.