Seguinos en nuestras redes

Policiales

Habló Guillermo Moyano, el jóven que generó los celos entre Daiana y Katherine

Señalado por la única detenida por el crimen y refugiado en una ciudad vecina, Guillermo Moyano rompe el silencio

El periodista Federico Fahsbender de Infobae entrevistó al joven que generó los celos entre la fallecida Katherine y su mejor amiga, Daiana.

Hoy, Guillermo ya no vive en su casa de Monte Hermoso, a pocas cuadras del médano en que apareció semienterrada Katherine. Por pedido de su madre, Mónica, tuvo que refugiarse en la casa de un familiar en una ciudad vecina.

Niega toda participación en el crimen: afirma haber estado trabajando, rindiendo examen en la escuela y en su casa en el posible margen de tiempo en que ocurrió el homicidio de la joven.

Publicidad

Según relata Moyano, Katherine Moscoso, la joven de 18 años asesinada a golpes en Monte Hermoso la semana pasada, se le había insinuado para tener un encuentro sexual fugaz. Guillermo aceptó: “Ella me buscó a mí”, aclara. Se dirigieron a los médanos cercanos, cubiertos de malezas y colas de zorro para un poco de privacidad, según su propio relato. Pero Guillermo y Katherine fueron vistos: una amiga de Daiana Sánchez, entonces novia de Guillermo, se los cruzó en el camino. Daiana le armó un escándalo inmediato, con llanto y platos rotos incluidos. Moyano logró calmarla. Tiempo después, Katherine volvió a él. “Me tocó la puerta tarde a la noche, mis viejos estaban dormidos. Fue un ‘toco y me voy’”, asegura. Daiana jamás se olvidó, por otra parte. Con Katherine ya enterrada, Sánchez -la única detenida por la muerte de Moscoso tras varias inconsistencias en su relato- decidió apuntar hacia su ex como presunto implicado en su reportaje con La Brújula 24, tras años de celos, reproches y escenas llenas de amenazas.

La última noche y después

Moyano estuvo en la disco Arenas de Monte Hermoso la noche del 17 de mayo, en que Katherine desapareció, aunque testigos afirman haber visto a la chica deambulando por las calles del pueblo el día después. Allí, dice él, “la vi bailando con dos hombres, de entre 20 y 25 años, no la saludé”. Tras salir de la disco al alba, Guillermo visitó a Daiana en la pieza que “Canini” le alquilaba: admitió tener sexo con ella. “Yo iba. Si estaba me abría la puerta, si no, no”, dice. El jueves pasado, dos días antes de la aparición del cuerpo de Katherine, declaró como testigo en una comisaría en Monte Hermoso. “Dos policías me van a buscar a mi casa. ‘¿Por qué?’, les pregunto, y se me ríen irónicamente”, dice: “Ya salí con miedo.”
¿Qué pasó después?
Vienen a verme estos dos oficiales. Todo el tiempo me recalcaban que yo estaba mintiendo, que no me creían. Me decían que iban a venir “los otros” y que “no van a ser tan amables.” Yo pensé que me iban a matar a palos. Vienen otros oficiales. Uno me dice: “Si consideramos que estás mintiendo, va a ser diferente”. No me agredieron físicamente. Pero me amenazaron, sí. Hablaron de “una bolsa en la cabeza”, algo así. Primero me dicen que en mi casa me van a linchar, después esto. Se supone que tengo que sentirme protegido por la Justicia. De nuevo, todo el tiempo me recalcaban que yo sabía algo.
¿Le comunicaste esto que ocurrió en la comisaria al fiscal del caso?
Sí, se lo dije. Me aseguró que no me iba a pasar nada. Tranquilo no estoy. Sentí asombro cuando Daiana dijo que me investiguen.
¿Creés que Daiana pudo haberlo hecho?
Yo no sé en qué creer. Sinceramente, no sé quién fue.
Publicidad
Publicidad

TE PUEDE INTERESAR