Cómo cuidar la piel deshidratada para que recupere el aspecto saludable

La piel deshidratada es piel sedienta, que necesita hidratación continua, todo el día. Para combatirlo, podés seguir estas recomendaciones.

Usá cremas que contengan ácido hialurónico y otros agentes hidratantes. El hialurónico es un agente activo que puede retener hasta mil veces su peso en agua, lo que le permite proteger la integridad de la barrera cutánea, para lograr una hidratación duradera. En consecuencia, la piel es más suave, elástica y con más “rebote”.

También se recomienda adoptar una rutina de belleza diaria y cuidado del cutis adecuado. Estos son los tres pasos fundamentales:

Retirar el maquillaje: elegí productos suaves e hidratantes, adecuados para tu tipo de piel, para una limpieza delicada no abrasiva. Si preferís las texturas acuosas, optá por un agua micelar que no sea agresiva. Si te gustan las texturas un poco más densas, elegí desmaquillantes lechosos, que eliminan profundamente el maquillaje a prueba de agua.

Limpieza facial: es fundamental para eliminar de tu piel todo lo que la hace opaca, al igual que las impurezas, los restos de maquillaje y el exceso de sebo. Usá un limpiador hidratante y delicado que no deje restos, para lograr una dermis impecable y elástica al tacto.

Hidratar y humectar: hidratá tu piel todos los días con hidratantes no grasosos, adecuados para tu tipo. Optá por los de textura de gel para lograr una sensación liviana. Aplicalos dos veces por día en cara y cuello después de la limpieza con movimientos circulares para lograr una mejor penetración.