El Gobierno nacional evalúa comprar aviones chinos de combate

En el mes de agosto de 2020, un A-4AR Fightinghawk cazabombardero de la Fuerza Aérea Argentina se estrelló al sur de la provincia de Córdoba. Uno de los mejores pilotos de la escuadrilla, Gonzalo Fabián Britos Venturi, se eyectó de la nave, pero falleció. Su muerte abrió nuevamente el debate sobre la necesidad de adquirir material aéreo para renovar la flota de aeronaves de guerra que posee el país.

El Gobierno nacional reconoció en el último informe de gestión del jefe de Gabinete, Juan Manzur, que evalúa cuatro ofertas de aviones para incorporar a la Fuerza Aérea Argentina y que la propuesta de China “cumple con los requisitos” solicitados.

En el presupuesto 2022 existía una partida prevista para la compra de 12 unidades de los aviones JF-17 que el gigante asiático produce en conjunto con Pakistán. Es la primera vez que el Ministerio de Defensa reconoce que tiene interés en esta clase de unidades.

Según la documentación disponible, se deduce que el Gobierno analiza ofertas por los ya mencionados chinos JF-17; una propuesta de los Estados Unidos por aviones F-16 A/B de segunda mano; un ofrecimiento ruso por sus MIG-35, y una cuarta propuesta de la India por sus Hal Tejas, una aeronave liviana de ataque que opera hace pocos años.

La opción que parecería correr con más ventaja es la oferta del JF-17 de origen chino-pakistaní. Se trata de un caza de ataque liviano con capacidad de combate aire-aire y aire-superficie y una velocidad máxima de 1.6 mach.

Esta aeronave puede portar misiles activos más allá del alcance visual; misiles infrarrojos de corto alcance; misiles aire-mar; armas guiadas por láser; bombas de penetración de pista y de propósito general y una pistola de doble cañón de 23 mm. La información se encuentra disponible en el sitio oficial del Complejo Aeronáutico de Pakistán.